Los cañones ofensivos de los Navegantes del Magallanes empezaron la temporada desajustados en los primeros días de la campaña 14-15.
Los actuales bicampeones del torneo terminaron la primera semana de torneo con récord negativo de 1-3, siendo barridos en su serie de fin de semana en Maracaibo ante las inspiradas Águilas del Zulia.
Ese récord en buena medida se debe a una ofensiva que no engranó en los compromisos iniciales, ligando un bajo .197 y registrando solo siete anotaciones en cuatro compromisos, la más baja del circuito en su semana de estreno.
Salvo Lew Ford (.400), Adonis García (.294) y Mario Lissón (.286), el rendimiento colectivo fue bajo.
También fueron el conjunto que menos extrabases disparó. El único cuadrangular salió del bate de Lissón en el segundo encuentro de la temporada. El porcentaje de slugging colectivo apenas llegó a los .268.
En la 2013-2014, los turcos anotaron 355 carreras en la ronda regular, la segunda mayor cantidad del circuito criollo.
Pero, mientras los toleteros no lograron producir, los lanzadores tuvieron una efectividad colectiva de 3.44, con especial labor de sus iniciadores (3.00).
“Sabemos que el pitcheo está respondiendo y eso es lo que me tiene tranquilo. La ofensiva no pasa por un buen momento, pero eso se mejora con trabajo”, soltó el mánager Carlos García al equipo de prensa turco.
“Prefiero que el pitcheo esté sólido y la ofensiva floja, porque con los bateadores se pueden hacer ajustes más rápido. Seguiremos haciendo trabajos extras de bateo”.
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