AMOR

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La ausencia de Geovany Soto detrás del plato de los Rangers de Texas se ha notado poco, gracias al trabajo realizado por el venezolano Róbinson Chirinos y su compañero Chris Giménez, quienes se han encargado de cubrir al puertorriqueño, mientras mejora de la lesión de rodilla.

En el caso del criollo, su aporte ha sido más significativo en las labores defensivas; hasta ayer, el falconiano había retirado a 21 corredores que intentaron robarle la base en 48 juegos, solo superado por el careta de los Tigres de Detroit, Álex Ávila (23 reventados a en 63 encuentros). 

Pero Chirinos ha mejorado, últimamente, con el madero. El domingo bateó de 3-3, con su séptimo jonrón de la temporada. “He estado trabajando duro para mejorar mi juego”, le comentó el criollo a Randy Jennings, de ESPN. “Últimamente me siento mejor en el plato”, agregó el receptor.

Hasta ahora, el promedio de Chirinos ha subido hasta .247 (158-39); además, colecciona 23 remolcadas y 14 anotadas. 

Su compañero Giménez batea para .305 en 17 juegos, desde que fue ascendido desde la filial triple A (Round Rock), el 20 de mayo. Por su parte, Chirinos está claro y sabe que debe seguir colaborando para mantenerse: “Debo hacer cualquier cosa que pueda para ayudar al equipo a ganar”.


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