Luis Severino. (Getty)

 El 2014 representó un ascenso meteórico e inesperado de parte del joven derecho Luis Severino dentro de la organización de los Yankees.

El dominicano empezó el año a nivel de Clase-A como un prospecto relativamente desconocido. Pero terminó el 2014 en Doble-A, con números sólidos como 10.1 ponches por cada nueve innings, efectividad de 2.46 y 0.2 jonrón por cada nueve entradas.

Ahora, a sus 20 años, Severino está calificado como el prospecto número 1 de los Yankees, tanto por MLB.com como Baseball America.

"Yo me siento muy bien, porque los Yankees reconocieron el esfuerzo que yo hice y me siento muy contento por eso", dijo Severino durante el Rookie Career Development Program para peloteros a punto de llegar a las Grandes Ligas. "Desde el principio de temporada siempre tengo una meta y mi meta era llegar a Doble-A. Pero no por eso me voy a dejar llevar de que soy prospecto número 1, ni me voy a descuidar. Voy a seguir trabajando igual, como siempre".

Cuando Severino habla de sus éxitos del 2014, expresa una motivación particular y no tan relacionado con el béisbol. Después de terminar el año anterior en Clase-A Charleston, Carolina del Sur, en la Liga del Sur del Atlántico, Severino arrancó la temporada pasada en la misma sucursal de Nueva York. Pero al oriundo de Sabana del Mar no le caía muy bien dicha localidad y quiso seguir adelante.

Misión cumplida.

"Al principio fue difícil, porque empecé en un lugar que no conocía, que fue en Carolina del Sur", expresó el diestro, quien fue parte del Juego de las Futuras Estrellas el año pasado. "No conocía mucho, pero me esforcé para poder salir pronto de ahí. Después de que salí de ahí, los otros niveles fueron más fáciles para mí".

En seis aperturas por Doble-A Trenton, Severino registró efectividad de 2.52 en 25.0 entradas, en las que permitió 20 hits y ponchó a 10.4 bateadores por cada nueve innings.

De cara a los entrenamientos, Severino pretende mejorar varios aspectos de su repertorio y su material, con la meta de subir a Triple-A-y cuidado si en algún momento al equipo grande.

"El año pasado tuve muchos problemas con la zona, la zona de afuera y la esquina de afuera, y también con la consistencia en mi rompiente, mi slider", afirmó. "En eso estoy trabajando mucho, para este año, si Dios quiere, poder hacer un buen trabajo.

"Mi meta este año, si Dios quiere, es llegar a Grandes Ligas. No sólo llegar, sino mantenerme arriba".

Severino se crió como fanático de los Yankees, y en particular señala a su compatriota Robinson Canó como uno de sus peloteros favoritos de cuando era niño. Ahora el lanzador se encuentra a unos pasos de poder vestir el uniforme rayado en el Bronx.

Definitivamente, sería un sueño hecho realidad.

"Significaría mucho para mí", comentó Severino acerca de dicha posibilidad. "No me imagino el día que me ponga ese uniforme allá arriba. No sé cómo explicar la sensación".