“Toda mi familia es magallanera, y yo desde chiquito siempre les dije que cuando creciera iba a batear bien contra ellos”, confesó el jardinero de La Guaira, que conectó un jonrón de dos carreras en el décimo inning para guiar el triunfo 7-4 de Tiburones sobre Navegantes.
Martínez se fue de 5-2, con su cuarto jonrón de la campaña. El estacazo sobrevoló el jardín derecho del José Bernardo Pérez y cayó en el bullpen del Magallanes. Fue una metáfora de lo que pasó en ese décimo acto, en el que él y Jamie Romak bombardearon al relevo carabobeño.
Ronny Cedeño igualó las acciones en el noveno acto, con un jonrón solitario. Pero su esfuerzo fue desaprovechado por el derecho Alex Burnett, que encajó los vuelacercas seguidos de Martínez y Romak.
“He trabajado bastante y no es un secreto que Alex (Cabrera) me ha ayudado mucho”, contó Martínez, que nunca había dado más de dos jonrones en una temporada en la LVBP. “Estoy tratando de conectar la bola hacia el jardín derecho y la cosa está resultando”.
Ese trabajo mancomunado entre “Cafecito” y el “Samurái” devino en la primera victoria de La Guaira en la semana, después de tres derrotas en fila. Además, evitó que el Magallanes extendiera a cinco su seguidilla de triunfos.
“No digo que le bateo mejor a un equipo que a otro, pero allá me está esperando el teléfono”, bromeó al final de la noche Martínez, en señal de que usaría el celular para recordarle a sus familiares magallaneros la promesa que de niño les había hecho.
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