AMOR

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Era duda, seria duda después de que ante Miami HJeat ni siquiera pudiese terminar el partido por una torcedura de su tobillo izquierdo, pero Marc Gasol jugó. Y cómo. El español fue pieza clave en la victoria de los Grizzlies sobre Indiana que sirve al conjunto de Memphis para apuntalar su plaza de playoffs en el tramo final de la temporada (82-71).
Marc Gasol lanza a canasta ante Paul George
Gasol tuvo que pasar por el hospital para que le realizaran una resonancia magnética el mismo sábado por la mañana después de la espectacular torcedura en un reverso sobre la línea de fondo. La prueba reveló una torcedura de grado 1 y le dejó como un gran interrogante
antes del encuentro frente a los Pacers. Sin embargo, el español no sólo jugó sino que permaneció 39 minutos sobre el parqué para volver a ser determinante.
No dominó en ataque, donde se quedó en apenas 10 puntos (4/11 en tiros de campo, 2/3 en tiros libres), pero volvió a demostrar su importancia en el equipo en defensa como a la hora de generar espacios para Zach Randolph. De hecho, su compañero en la pintura terminó el encuentro con un doble-doble (18 puntos, 13 rebotes) mientras que el base Mike Conley fue el máximo anotador de los Grizzlies con 21 puntos. Gasol también sumó nueve rebotes, dos asistencias, dos tapones y un rono.
Con esta victoria, la séptima en los últimos 10 partidos, los Grizzlies se sitúan con una marca de 41-28, penúltimos de la División Suroeste y en la octava y última plaza que da acceso a los playoffs de la Conferencia Oeste, con un partido de ventaja sobre los Phoenix Suns y a tan sólo media victoria de la séptima posición que ocupan los Dallas Mavericks de José Manuel Calderón.

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