Salvador Pérez y Alcides Escobar.

PEORIA, Arizona - A sus 28 y 24 años, respectivamente, Alcides Escobar y Salvador Pérez se han convertido en especies de "Hombres de Hierro" en los Reales de Kansas City.

Los venezolanos rechazan en cada oportunidad los días libres, aun cuando juegan dos de las posiciones más exigentes en el terreno de juego: las paradas cortas y la receptoría.

"Me gusta jugar. Cada vez que vengo acá es con deseo de jugar", dijo Escobar, quien lleva promedio de .297 en sus primeros 10 encuentros de la pretemporada. "Los días que el manager (Ned Yost) me dice, 'Te voy a dar un día libre', le digo 'No no, no quiero'.

"No me pelea y me pone a jugar".

En el caso de Escobar, el torpedero disputó cada uno de los 162 partidos de la temporada regular de los Reales el año pasado. Desde marzo del 2014 hasta enero de este año, el oriundo de La Sabana jugó en 199 encuentros entre la pretemporada, la campaña regular, la postemporada, la Serie de Estrellas en Japón y la Liga Venezolana de Béisbol Profesional.

Cuando se trata de Pérez, el valenciano fue titular en la receptoría para 145 choques de la temporada regular del 2014, más 15 de los playoffs/Serie Mundial. Y como si eso fuera poco, decidió al igual que Escobar ser parte del equipo de MLB que disputó siete partidos en Japón en noviembre.

"Me gusta lo que hago, me encanta", dijo Pérez, quien llegó al viernes bateando .286 en nueve choques de la Liga del Cactus. "Me preparo para disputar bastantes juegos. Me preparo para estar en una temporada completa saludable, fuerte para jugar duro y hacer las cosas para el recovery, que te ayudan a recuperarte".

Yost ha expresado que tiene previsto darle un mayor descanso en el 2015 a Pérez, quien bateó apenas .229 en la segunda mitad de la temporada pasada, con porcentaje de embasarse de .236 y slugging de .360. Eso fue después de registrar .283/.329/.437 en la primera mitad de la campaña.

Pérez tiene cuerpo de cátcher, sin duda. Y a sus 24 años apenas, se sabe que aún puede aguantar la carga física de muchos juegos-con todo y lo que puede implicar eso para su ofensiva.

De su parte, Escobar se ha desarrollado bastante a nivel físico desde que subió a las Grandes Ligas en el 2008 como un torpedero alto pero bastante delgado. Ahora con 185 libras, Escobar se ve con más masa muscular y sin señales de aflojar el ritmo.

"Es algo natural, porque no hago mucho gimnasio", comentó Escobar acerca de cómo se ha llenado del cuerpo en los últimos años. "Ahora tengo 28. Me he desarrollado bastante. He venido trabajando y madurando en el béisbol".