Después de 13 temporadas en MLB y 16 en la LVBP, el receptor mirandino de 34 años de edad no ha podido titularse con ninguno de sus equipos.
“Lo que quiero es ayudar al equipo a ganar esa gran final, ese triunfo, ese campeonato”, dijo Torrealba a la jefatura de prensa del club.
El careta no jugó en las Grandes Ligas este año por primera vez desde 2001, y aunque espera recibir una nueva oportunidad, no se apresura. Antes que nada, quiere recuperar el tiempo perdido en la 2013-2014, por culpa de la cirugía en la rodilla derecha.
“El año pasado no pude jugar lamentablemente por lesiones. Si no, hubiese estado con el equipo”, recordó.
“Este año es diferente. Gracias a Dios estoy sano y saludable. Eso es lo importante”.
“Este año es diferente. Gracias a Dios estoy sano y saludable. Eso es lo importante”.
Su incorporación ayudará al Caracas a subsanar una posición que no tendrá desde el principio al pelotero que la ha defendido con mayor regularidad en las últimas dos temporadas: Ramón Cabrera.
El vástago de Álex Cabrera tendrá que ir a la Liga Instruccional, por lo que se incorporará a finales de octubre. Además, el grandeliga Jesús Sucre terminará en las mayores con Marineros de Seattle, lo que dificulta su temprana incorporación al equipo.
“(Yórvit) se vio bien, se ha mantenido en forma y está motivado para jugar”, dijo el mánager del Caracas, Dave Hudgens. “Su experiencia será muy valiosa para los jóvenes receptores”.
Entre esa nueva camada de catchers está Carlos Pérez, que se ganó elogios la campaña pasada y que ya está con el equipo.
Hudgens avizora que Torrealba y Pérez se alternarán la receptoría al principio de la campaña. “Siento que todavía puedo ayudar al equipo y transmitirle mi experiencia a esos muchachos”, agregó Torrealba.
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