"Como siempre: lo urgente no deja tiempo para lo importante...". Mafalda
En materia de pitcheo, el béisbol ha dado un cambio radical.
Es difícil proyectar los brazos de los pitchers en la actualidad como potenciales ganadores de 300 juegos de por vida y 150 juegos completos. Y podríamos ir un poquito más lejos, los de 20 victorias y 300 innings en una estación es otra especie que se encuentra en extinción en las Grandes Ligas.
El cambio se aprecia en la "Salida de Calidad", donde la responsabilidad del lanzador es de 6 sólidas entradas y 3 o menos carreras limpias permitidas. Los pitchers que inician un juego no se espera que terminen lo que comienzan, lo que ha valorizado el trabajo del preparador con el "hold" y la del cerrador con el salvamento. El relevista tiene hoy un status altamente cotizado.
Para poner un ejemplo de un lanzador de brazo de goma está Juan Marichal, que ganó 243 partidos, y completó 244, y en la década del '60 cubrió la ruta completa 197 veces, incluyendo 30 en 1968.
En el 2013, los líderes de juegos completos fueron, con cuatro cada uno, en la Americana, David Price (Tampa) y Chris Sale (White Sox), y en la Nacional, Adam Wainwright (San Luis) y Jordan Zimmermann (Washington).
La diferencia es del cielo a la tierra.
Este año Johnny Cueto, de los Rojos de Cincinnati, es el líder de las Grandes Ligas, con tres.
Si queremos otro ejemplo de un brazo de goma está el caso de Robin Roberts, que en la década del '50 tuvo un promedio de 300 innings por campaña. En esa década lanzó más de 300 episodios seis veces: 1950, 304.1; 1951, 315.0; 1952, 300.0; 1953, 346.2; 1954, 336.2 y 1955, 305.0.
El año pasado, el líder de innings lanzados fue Clayton Kershaw, de los Dodgers de Los Angeles, con 236.0, único que superó la barrera de los 200.
Alarma hoy la cantidad de pitchers sometidos a la Tommy John ,y tenemos dos muestras de cirugía con José Fernández (Marlins), con 224.1 innings lanzados de por vida e Iván Nova (Yanquis), con 537.2.
0 comentarios:
Publicar un comentario