A veces dejarse llevar por las emociones y no analizar las situaciones y estrategias en frío puede llevar a un camino sin salida, debido a la toma de decisiones erradas.
El lanzador dominicano de los Reales de Kansas City, Kelvin Herrera, entendió, a las malas, todo eso el año pasado, tras perder su rol estelar de setup en el equipo y ser enviado a ligas menores.
Jamie Squire/Getty ImagesHerrera tuvo marca de cinco victorias y siete derrotas, con 3.86 de efectividad en el 2013.
"Aprendí que lo importante es estar concentrado en lo que uno está haciendo en el día de hoy, sin pensar en el ayer y en controlar también las emociones", dijo Herrera a ESPNdeportes.com en la sede primaveral de los Reales, en Surprise, Arizona.
Durante la primera mitad de la temporada pasada, el derecho fue un lanzador predecible y, desde luego, vulnerable. Las razones básicas de esa situación fueron la limitación que se impuso en su repertorio y la falta de localización en sus pitcheos. En ambos factores la ansiedad influyó un poco.
"Lo que pasó fue que me autoeliminé un pitcheo la temporada pasada, la curva, un pitcheo bueno que tenía. Este año voy a tratar de lanzarla un poquito más y a tratar de sacar outs, porque eso es para lo que me están pegando", expresó el apagafuegos, quien en el 2013 tuvo marca de cinco victorias y siete derrotas, con 3.86 de efectividad.
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